Había una vez, un fanático muy pero muy fanático a la iglesia que se llamaba Perencejo y estaba casado con Maruca, el salía tempranito todos los días a la iglesia por que le quedaba como a 5 horas de su pueblo, su mujer le pegaba los cachos, un día el salio como de rutina, y maruca levanta el teléfono, y dice: Joaquín ven corriendo que me marido salio y tengo deseos de tener sexo con tigo, tocan el timbre va a ver quien es por el ojo mágico de la puerta, le abre la puerta es Raúl, están en pleno sexo y tocan la puerta ella nerviosa dice: hay creo que es mi marido se va a ver, a no es Pedro, pasa y están asiendo un 2 para 1 Pedro por delante y Joaquín por detrás, y de repente tocan la puerta. Va a ver, hay ahora si llego mi marido, le pone petillo a la puerta, y dice: corran, corran, tu Pedro como eres mas pequeño y mas flaco escóndete arriba del closet y tu Joaquín como eres mas fuerte y mas alto escóndete debajo de la cama, y Petronila le abre la puerta a su marido, y entra Perencejo muy feliz como siempre y le da un beso y un abrazo y le grita: amor con la ayuda de el de “ARRIBA” nos vamos a comprar otra casa, por que con la ayuda del de “ARRIBA” vamos a salir de todas las deudas por que con la ayuda del de “ARRIBA” nos vamos a comprar una televisión con pantalla plasma por que con la ayuda del de “ARRIBA” nos vamos a ir de vacaciones para Hawai, por que con la ayuda del de “ARRIBA” y se tira pedro que esta “ARRIBA” del closet corriendo y sale y se para en la calle y le grita “Y EL DE ABAJO NO VA A PONER NADA HIJO DE PUTA”